Elige bien tu factor de protección solar
Ya comentamos en el artículo “Prepárate para el sol” que tomar el sol es bueno para nuestra salud. Pero debemos tomar ciertas precauciones para proteger nuestra piel de los rayos solares (UVA y UVB) ya que éstos pueden provocar cambios en el ADN y crear alteraciones como: eritemas (enrojecimiento de la piel), quemaduras, manchas e incluso carcinomas (cáncer de piel). Los rayos UVA son los responsables del enrojecimiento, del bronceado y de las quemaduras y los UVB son los responsables de las manchas y de los carcinomas.
Por todo esto debemos protegernos del sol durante todo el año usando filtros físicos (gorros, gafas y ropa) y químicos (cremas, aerosoles y lociones).
Cuando nos aplicamos sobre la piel un protector solar químico, lo que hacemos realmente es aumentar la capacidad de nuestra piel a resistir la radiación solar que nos llega, retardando de esta forma las posibles quemaduras que sobre ésta se podrían producir.
¿Cómo decido qué numeración de FPS aplicarme?
Los diferentes tipos de factores solares nos indican cuanto tiempo nuestra piel puede estar totalmente protegida del sol. Es decir, un factor de protección solar (FPS) de 15 sólo nos proporciona unos 15 minutos de protección, en cambio uno de FPS 50 será de 50 minutos.
Todo depende también del fototipo de piel (capacidad de pigmentación de la piel). Un fototipo I o II- pertenecen a las personas más blancas y necesitan un factor de protección solar de 50 porque son más sensibles al sol. Antes de los 50 minutos deben volver a aplicarse otra vez el protector solar y nunca estar expuestas a las horas de más insolación, de 12 a 16h.
Es importante tener en cuenta que una crema con FPS no tiene capacidad de hidratación ni regeneración a pesar de su textura, así que antes será necesario aplicar el tratamiento de hidratación habitual y después de la exposición habrá que tratar la piel tanto del cuerpo como de la cara. También es importante tener en cuenta tu tipo de piel (seca, mixta o grasa) para poder elegir un producto de protección facial adecuado.
Recuerda que cada persona es distinta, y que no es conveniente generalizar a la hora de hablar de estos temas. Factores como la edad y el estado de salud también son muy importantes, por lo que tendremos que tener cuidado con los niños y con las personas mayores, cuyas pieles son más sensibles.
Los siguientes consejos y advertencias propuestos por el colegio oficial de farmacéuticos y por el ministerio de sanidad y consumo son importantes a la hora de tomar el sol:
• Evitar la exposición solar entre las 12 y las 16 horas.
• Los fotoprotectores se deben utilizar incluso en días nublados.
• El agua, la hierba, la arena y la nieve reflejan los rayos solares, aumentando los efectos de las radiaciones sobre la piel, por lo que hay que utilizar fotoprotectores más altos.
• Evitar largas exposiciones al sol. Procurar no dormirse al sol.
• No utilizar colonias, desodorantes u otros cosméticos en la exposición al sol, producen manchas.
• Proteger la piel con ropa y la cabeza con un sombrero.
• Hay medicamentos y productos cosméticos que producen en la piel una reacción de fotosensibilidad por la exposición solar, consulta a tu farmacéutico.
• En casos especiales: embarazo, patologías cutáneas, trabajadores al aire libre, individuos con antecedentes familiares de cáncer y fototipos muy bajos I y II, aplicar productos de alta protección o evitar tomar el sol.
• Extremar las medidas protectoras en cualquier actividad al aire libre.
• Vigilar los cambios de color, forma o tamaño de pecas o lunares, consúltalo con tu dermatólogo.
• Proteger los ojos con gafas de sol que lleven protección 100% UV (azul del visible).
• No utilizar protectores solares abiertos desde el año anterior. (Pierde su eficacia).