Cambiar los hábitos de alimentación, primer paso para cuidarse
¿Quieres alcanzar tu peso saludable y mantenerlo en el tiempo? ¿Estás cansado/a de ponerte a dieta cuando llega el buen tiempo? Cualquier momento es bueno para empezar a cuidarse, para adoptar hábitos que nos ayudarán a ganar calidad de vida y que serán nuestros grandes aliados para lograr ese equilibro entre mente y salud que necesitamos para estar tranquilos y ser felices.
Aprovecha la primavera para cambiar tus hábitos alimenticios, un gran paso para empezar a cuidarte. Será una de las mejores decisiones que tomes en tu vida. Súmate a la alimentación saludable y comienza a notar todos los beneficios. Recuerda que, a medida que envejecemos, habrá que cuidarse mucho más. Por tanto, cuando antes modifiquemos nuestros hábitos, mayor calidad de vida se tendrá.
Uno de los principales beneficios de apostar por una nutrición saludable es que podrás vivir más tiempo. Además, mantendrás la piel y los dientes sanas. También contribuirás a mantener tu sistema inmune en perfecto estado y ayudarás al sistema digestivo a su normal funcionamiento.
A esto tenemos que sumar que podrás lograr y mantener un peso saludable, lo que significa que podrás olvidar de la famosa “operación bikini”, esa que la gran mayoría hace cuando llega la primavera para bajar los kilos ganados en invierno.
Pero ¿cómo podemos cambiar nuestros hábitos alimenticios? Desde Yesfarma te damos las claves para sumarte a una alimentación saludable de por vida.
¿Cómo cambiar los hábitos de alimentación?
Una de las primeras cosas que se debe hacer es tomar conciencia de lo que se necesita mejorar. Quizá seas una persona que come sus cinco piezas de frutas y verduras al día, pero picoteas snack fritos y consumas comida precocinada. O quizá seas esa persona que no prueba ni la fruta ni la verdura. Hay que saber desde dónde se parte para ir cambiando esos hábitos poco a poco.
Para alcanzar el éxito de tu nuevo propósito te recomendamos cambiar tus hábitos alimenticios poco a poco. Lo ideal es marcarse pequeños retos diarios, semanales y mensuales. De esta forma, conseguirás convertir algo que no hacías en un hábito. Por ejemplo, podrás empezar tomando fruta a media mañana y para merendar. En el caso de la verdura, inclúyela en tus platos de menos a más.
Si, por ejemplo, tu problema son los dulces, apuesta por tomar una onza o dos de chocolate negro. Te ayudará a controlar los antojos de dulces y, por tanto, evitará que comas bollería.
Otro pilar fundamental para comer más saludable es ir a la compra con una lista y no salirse de ella. Evita ir a comprar con hambre. También es importante planificarse las comidas. Por ejemplo, podrás dejarte listas las verduras. Así mientras las calientas vas haciendo el filete de pollo o pavo para que este más jugoso.
¡No te olvides de la hidratación! Si eres de los que le cuesta beber agua, lleva siempre una botella encima y vete dando pequeños sorbos a lo largo del día. Con este sencillo gesto conseguirás beber al menos el litro y medio de agua recomendado. Notarás los cambios desde el primer día. Entre los beneficios, destacar: aliviarás la fatiga, ayudarás a la digestión, evitarás el estreñimiento y tu piel lucirá más radiante.